Es un día esplendido, creo que voy a ir a cenar con mi novia. Por lo menos eso arreglamos ayer, espero que la vieja, la madre, no se ponga cargosa. Pero aparece José Luís y con “la rica” así que cambio, casi sin querer de planes. Digo casi porque en realidad yo tenía ganas de ir con mi chica, la extraño y sin embargo no puedo decir que no a la cagada que estoy por mandarme. Son las 6 de las tarde y nos metemos en el baño del Bar del Teatro. El flaco José Luís me vende 200 mangos bien servidos. Pago. Me pego un buen saque y partimos con una despedida rápida de esas que uno no recuerda si dijo adiós, te veo luego o anda a cagar hijo de puta. No llego al umbral de la puerta y ya siento esa euforia que pronto será angustia.
Se lo que tengo que hacer. Por lo menos llamar a la flaca para meterle algún bolazo, no sé, una excusa que sea creíble. No se me ocurre nada. Camino hasta el auto. Seguro  que con el próximo saque se me va a ocurrir algo. Ya adentro del auto, meto la llave en la bolsa y levanto “un toque” generoso. Se me tiene que ocurrir algo pero lo único que se me ocurre es que es buena merca y que mejor me voy a casa, apago el celular, estaciono ansioso en la puerta de mi bulín, me meto adentro y peino una buena raya, la tomo de una.

 

Son las 19:30, ya no sé si voy a salir de casa, no, por lo menos hasta asegurarme de que no haya nadie en la calle. Siento que está todo bien aunque sé que esta todo mal y empeorará, uffffff!!! esto de no poder disfrutar de nada me enfurece, tengo una bolsa grande y lo demás, ya veremos.
Peino otra, también grande, ya empiezo a sudar a borbotones como si hubiese corrido una maratón, quizá la esté corriendo de algún modo, no sé, eso parece. Lo bueno es que me estoy ahorrando la cena, con esta dureza no puedo comer ni un maní. Se me aparecen los problemas de siempre, las deudas, las mentiras, lo que voy a perder, novia, trabajo, casa, etc… pero me chupa un huevo, me queda un montón en la bolsa Parece raro pero todos los quilombos se diluyen en esta farsa, al menos por un rato.
Son las 9 de la noche y no quiero hablar con nadie, así que también desconecto el fijo, en la tele quizá haya algo ,doy vueltas por todos los canales y nada, toda la mierda de siempre, encima me parece que los vecinos están sospechando por el modo en que hago zapping, bajo el volumen del todo y espío a ver si hay alguien en el pasillo, la mirilla está tapada, ¡qué cagada! la tape la ultima vez porque me pareció que me miraban, y no se si no me están mirando ahora, mejor tiro unos trapos debajo de la puerta para tapar la hendija, despacio para que no me escuchen, bajo las persianas y mejor cierro también las ventanas, estamos en enero pero mejor prevenir.

Ya es medianoche y como un boludo dejé el auto en la puerta, cualquiera se va dar cuenta que estoy acá. Tengo que bajar,  total hay poco movimiento en la calle y si me encuentro con algún vecino, le digo que tengo fiebre, tengo todo el cuerpo empapado en sudor. Quito la toalla con que tapé la hendija de la puerta y me seco, abro la puerta y sé que no tengo buena cara, pero debo guardar el auto. Gracias a Dios no me encuentro a nadie conocido por lo menos hasta ahora. El auto de mierda hace más ruido que nunca. Arranca y despacio lo meto en su lugar. Vuelvo rápido. Nadie me vio. Buenas noches vecino, me dice el viejo de arriba que se le ocurre sacar a pasear a su maldito perro a esta hora. Casi que no le contesto, solo un ademán y un -buenas-  Se queda mirándome, ¿será que se dio cuenta de algo? Qué se vaya a la mierda. Entro en el bunker de nuevo, enrosco las llaves y tiro la toalla debajo de la puerta para tapar la hendija, Justo ahí me doy cuenta que no tengo ni una botella de vino, ni siquiera una cerveza pero ¿volver a salir?, ni en pedo.
Hace más de 6 horas que estoy peinando líneas cada media hora sistemáticamente, así no hay bolsa que aguante, me peino otra para ir terminando esta mierda que me tiene loco desde las 6 de la tarde. Ya sé, lo llamo a José Luis y le pido que me aguante otra bolsa hasta mañana, por lo menos de un gramo. Me encierro en el baño para que nadie me escuche, llama, llama y atiende el contestador, ahora recuerdo como lo despedí en el bar, te veo luego y no me atiende, andá cagar hijo de puta.

Son más de las 4 y peino la ultima raya , intentaré llamar de nuevo aunque me gaste todo el crédito en el contestador. Efectivamente: -su crédito no le permite realizar esta llamada- váyanse todos al mierda. Me meto en la ducha y me alivia un cacho el calor. Me tiro en la cama. Me quiero hacer una paja. No se me para. Doy vueltas para uno y otro lado ya no me importa hacer ruido. Paso así las próximas 2 horas y comienzan los trinos de  un caserito que parece que me lo hace a propósito, pájaro de mierda, me recuerda que a esta hora se levantan todos después de haber dormido normalmente y arrancan para el laburo, y yo que no sé a qué hora me voy a poder dormir, solo angustia y desazón, me siento como el culo y no quiero decir que nunca más vuelvo a tomar porque ya lo dije mas de mil veces.

 

Glosario:

 

La rica-------- cocaína de buena calidad
Bien servidos---------abundante cantidad
Bolsa-----pequeño trozo de nylon donde se guarda la droga
Peinar-------servir la droga de modo que pueda consumirse
Caserito--------ave autóctona que suele ser la primera en dejar oír sus trinos por la mañana.

Dureza-------- estar bajo los efectos de la cocaína.

 

                                                                                                                              Texto: José Puesto
                                                                                                                               Ilustracion: YNTG